sábado, 9 de agosto de 2014

Más.... mitos y leyendas griegas

Ulises y las sirenas

Probablemente el relato más conocido de las sirenas sea el de La Odisea de Homero.
Después de pasar una larga temporada en el palacio de Circe, Ulises emprende definitivamente el camino a Ítaca.
La diosa, antes de dejarle partir, le adelanta algunas de las aventuras que va a vivir en los días siguientes. La primera de ellas será el encuentro con las sirenas.
Las sirenas han sido famosas seductoras, porque según la mitología eran capaces de encantar con su voz a los marinos con la intención de raptarlos.
Al cantar, parecían ser hermosas doncellas, pero los que sucumbían ante sus encantos, pronto averiguaban su verdadera naturaleza. El canto de las sirenas anunciaba de forma engañosa los placeres del mundo subterráneo.
Las sirenas vivían en la isla de Artemisa, en donde yacían los huesos de los marineros que habían sido atraídos por sus deliciosos cantos.
x
Ulises quiso escuchar el canto de las sirenas.
Odiseo (Ulises), hombre de gran imaginación, cuando se iban acercando a la isla temida, por consejo de Circe, ordenó a sus hombres que se taparan los oídos con cera, y él, que no podía con la curiosidad de escucharlas, se hizo amarrar al mástil, con orden de que pasara lo que pasara, no lo desataran.
Al escuchar los cantos de las sirenas quiso soltarse pero sus compañeros no se lo permitieron. Cuenta la leyenda que las sirenas, devastadas por su fracaso, se lanzaron al mar y murieron ahogadas


Fuente Internet::
x
¿Un hijo de Poseidón?

La Leyenda de Pegaso

Pegaso es un caballo alado. Su nombre proviene de una palabra griega que significabamanantial, pues se decía que había nacido en las fuentes del Océano.
Hay varias versiones de su nacimiento. Por un lado se decía que había nacido del cuello de la Gorgona, cuando Perseo la mató en el mar. En esta perspectiva, resulta que su padre es Poseidón, y Crisaor su hermano gemelo.
Otra versión sostiene que nació en la Tierra, fecundado por la sangre derramada de la Gorgona, cuando Perseo la mató.
Una vez que nació, Pegaso fue al Olimpo, donde se puso a las órdenes de Zeus, al llevarle el rayo.
El papel de Pegaso más importante es en la leyenda de Belerofonte, sobre la que hay diversos argumentos.
Por un lado, se decía que Pegaso había sido regalado a Belerofonte por la diosa Atenea (diosa de la sabiduría), pero según otras historias fue Poseidón el que dio el caballo a Belerofonte.
x
Belerofonte montando a Pegaso.
También se contaba que el héroe lo había encontrado cuando bebía en la fuente de Pirene.
Fue gracias a Pegaso que Belerofonte pudo matar a la Quimera y lograr por sí solo la victoria sobre las Amazonas.
Cuando Belerofonte muere, Pegaso volvió a la morada de los dioses.
Tiempo después, se dio el concurso de canto que enfrentó a las Musas con las hijas de Píero. El Monte Helicón estaba muy complacido por la belleza de las voces, por lo que empezó a crecer amenazando con llegar al cielo.
Al ver el peligro, Poseidón le ordenó a Pegaso que fuera y golpeara a la montaña con uno de sus cascos para logrtar que volviera a su tamaño normal, a lo que la montaña obedeció dócilmente.
Pero, en el lugar donde Pegaso la había golpeado brotó la Fuente Hipocrene, o Fuente del Caballo.
Por último, Zeus lo convirtió en Constelación, para que fuera eterno. Cuando esto sucedió, un pluma de sus alas cayó cerca de Tarso, y así la ciudad adoptó su nombre.

La leyenda de Edipo

En la leyenda Edipo es el hijo de los reyes de Tebas quienes ordenan su muerte nada más nacer para evitar el maleficio de un viejo oráculo que aseguraba que el hijo nacido de estos reyes mataría a su propio padre y se casaría con su madre.
Sin embargo, el criado encargado de ejecutarlo se apena de la criatura y se lo entrega a un pastor que casualmente andaba por la región. Éste de regreso a su patria en Corinto entrega el hermoso niño a los reyes del país para que lo adopten.
x
Edipo frente a la Esfinge.
Cuando Edipo crece, un día se entera del extraño oráculo y aterrorizado decide escapar lejos de los que cree sus padres. En su huida, se topa en una encrucijada con un coche de caballos que está a punto de atropellarle. Estalla una disputa y Edipo mata al señor de carro, un noble cuyo nombre ignoraba. Era Layo, rey de Tebas.
Edipo prosigue entonces su camino, dirigiéndose precisamente a esta ciudad, pero le sale al encuentro un terrible monstruo, mitad mujer, mitad león alado, conocido con el nombre de Esfinge, que asolaba la región, destruyendo a todos aquellos que no sabían contestar certeramente a una pregunta que les hacía.
Las adivinanzas de la Esfinge eran dos:”¿Quién es el ser que al amanecer camina a cuatro patas, a mediodía sobre dos y al anochecer sobre tres?”.
Edipo da la respuesta correcta: “El hombre, que en su infancia gatea, en su juventud camina erguido y en su senectud se apoya en un bastón”.
La Esfinge plantea la segunda: “¿Cuáles son las hermanas que se engendran mutuamente?”.
Edipo vuelve a acertar: “El día y la noche” (estas dos palabras son femeninas en griego).
Una vez resuelto el enigma, el monstruo se suicida, y Edipo entra en la ciudad liberada de su maldición. Allí la reina Yocasta, viuda del rey Layo, recientemente desaparecido, decide casarse con el salvador de la ciudad. De él tendrá una prole nefanda: dos hijas, Antígona e Ismene, y dos hijos, Eteocles y Polinices.
Así se había cumplido la profecía. Y Edipo acaba matando a su propio padre, se casa con su madre y tiene de ella cuatro hijos que a la vez son sus hermanos.
La maldición de esta familia continuó con el fin aciago de los hijos de Edipo.
x
Eurídice arrobada por el canto de Orfeo.

La leyenda de Orfeo y Eurídice

Cuentan que cuando Orfeo tocaba no sólo los hombres, animales y dioses se quedaban embelesados escuchándole, sino que incluso la Madre Naturaleza  detenía su fluir para disfrutar de sus notas, y que así, los ríos, plantas y hasta las rocas escuchaban a Orfeo y sentían la música en su interior, animando su esencia.
Más de una vez este mágico don le ayudó en sus viajes, como cuando acompañó a los Argonautas y su canto pudo liberarles de las Sirenas, o pudo dormir al dragón guardián del vellocino de oro. Pero eso es otra historia y debe ser contada en otra ocasión...

Además de músico y poeta, Orfeo fue un viajero ansioso por conocer, por aprender... estuvo en Egipto y aprendió de sus sacerdotes los cultos a Isis y Osiris, y se empapó de distintas creencias y tradiciones. Fue un sabio de su tiempo.
Con tantas cualidades, no era de extrañar que las mujeres le admiraran y que tuviera no pocas pretendientes. Eran muchas las que soñaban con yacer junto a él y ser despertadas con una dulce melodía de su lira al amanecer. Muchas que querían compartir su sabiduría, su curiosidad, su vitalidad.
Pero sólo una de ellas llamó la atención de nuestro héroe, y no fue otra que Eurídice, quien seguramente no era tan atrevida como otras y puede que tampoco tan hermosa... pero el amor es así, caprichoso e inesperado, y desde que la vio, la imagen de su tierna sonrisa, de su mirada brillante y transparente, se repetían en la mente de Orfeo, que no dudó en casarse con ella. Zeus, reconociendo el valor que había demostrado en muchas de sus aventuras, le otorgó la mano de su ninfa, y vivieron juntos muy felices, disfrutando de un amor que se dice que fue único, tierno y apasionado como ninguno.
x
Orfeo va al mismo infierno a buscar a Eurídice.
Pero no hay felicidad eterna, pues si la hubiera, acabaríamos olvidando la tristeza, y la  felicidad perdería su sentido... y también en esta ocasión sobrevino la tragedia.
Quiso el destino que el pastor Aristeo quedara también prendado de Eurídice, y que un día en que ésta paseaba por sus campos, el pastor olvidara todo respeto atacándola para hacerla suya. Nuestra ninfa corrió para escaparse, con tan mala fortuna que en la carrera una serpiente venenosa mordió su pie, inoculándole el veneno y haciendo que cayera muerta sobre la hierba.
No hubo lágrimas suficientes para consolar el dolor de Orfeo, y una noche de las muchas que pasó en vela llorando a su amada, decidió que si hacía falta, descendería él mismo a los infiernos de Hades para reclamar a Eurídice.
Fue un viaje duro, tuvo que enfrentarse al guardián de las puertas de los Infiernos, Kancerbero, quien a punto estuvo de atacar pero que finalmente respondió a la música de Orfeo como otros tantos animales habían hecho anteriormente. Así fue como nuestro músico se internó en el submundo, sin cesar de tocar y de cantar su tristeza.

Cuentan que el mismo Hades se detuvo a escucharle, que las torturas se interrumpieron, que todos encontraron un momento de paz en la visita de Orfeo.
x
Orfeo intentando retener a Eurídice que se esfuma.
Sísifo, condenado a subir una piedra hasta la cumbre de la montaña una y otra vez, detuvo su marcha; los buitres que torturaban a Prometeo desgarrando sus entrañas se posaron en el suelo y Tántalo, quien jamás podría saciar su hambre o su sed, rompió a llorar olvidando sus necesidades.
Y los Señores del Infierno, Hades y Perséfone, quedaron conmovidos por la belleza del canto de Orfeo.
Así, decidieron devolver a la vida terrenal a Eurídice, con la condición de que ésta caminase detrás de Orfeo en el viaje de vuelta al mundo de los vivos, y que éste no mirase atrás ni una sola vez hasta que no estuvieran en la superficie. Y ambos emprendieron la marcha.
El viaje fue difícil, lleno de penurias. Si la bajada al Hades había costado, el ascenso fue aún peor. Eurídice seguía herida y débil, y las sombras se cernían sobre ellos amenazadoras, el frío se colaba en sus huesos, los tropiezos eran cada vez más frecuentes. A punto ya de llegar a la salida, cuando los primeros rayos de luz traspasaron las sombras, Eurídice dejó escapar un suspiro aliviada, y Orfeo olvidó la orden de Hades y miró hacia atrás  por un instante.
Entonces su amada empezó a desvanecerse, pues la condición impuesta había sido violada, y aunque Orfeo se lanzó sobre ella en un abrazo que la retuviera, no fue más que aire lo que estrechó entre sus brazos.
Orfeo intentó entonces descender de nuevo al Hades, pero Caronte, el barquero de la laguna Estigia, le negó la entrada, y ambos apenas pudieron despedirse con una mirada a través de las aguas. Y aunque esperó Orfeo siete días con sus siete noches en el margen del lago, acabó viendo que era demasiado tarde para enmendar su error, y marchó a vagabundear por los desiertos, sin apenas probar bocado, acompañado sólo por su lira y su música. 

Los dioses griegos

MITOLOGÍA CLÁSICA: LOS NOMBRES DE LOS DIOSES GRIEGOS Y ROMANOS

"Y ... [Zeus] les dijo a los dioses eternos:
Es de ver cómo inculcan los hombres sin tregua a los dioses
achacándonos todos sus males. Y son ellos mismos
los que traen por sus propias locuras su exceso de penas."
Homero, Odisea 31-34 

EL PANTEÓN GRECO-ROMANO

Los griegos crearon una religión con un panteón de dioses y diosas (politeísta) y una mitología, que fueron adoptados después por los romanos.
  Los Dioses del Olimpo. 
Fuente: http://1esoramonareces.blogspot.com.es/2012/04/dioses-griegos.html

Los dioses griegos eran inmortales y habitaban en el sagrado monte Olimpo. Vivían como los seres humanos, formaban familias, se amaban y peleaban, pero teníanenormes poderes y controlaban las fuerzas de la naturaleza. Además eran incansables y no conocían el hambre. Se representaban con símbolos de su especial poder, dominio o habilidad (fuego, belleza, guerra, caza, el amor, etc.)

PRIMERA GENERACIÓN DE DIOSES GRIEGOS (HIJOS DE CRONOS (EL TIEMPO) Y REA CON SUS CARACTERÍSTICAS: 
  • ZEUS. Dios de la luz, cielo sereno y fenómenos atmosféricos.
Símbolos: rayo, águila, nimbo, balanza, serpiente, toro.
Divinidad Patriarcal, protectora de los hombres y bienes, salvadora y justiciera. 
Carácter Ctónico: Dios de la vida y fertilidad. 
  • POSEIDÓN. Dios que reina sobre el mar y las aguas.
Símbolo: Tridente, caballo y pez.
Protector de marinos y pescadores
Unido a Démeter: dios de la fertilidad.   
  • PLUTÓN. Denominado El Rico (de la raíz Ploutos=riqueza). También Hades, como Dios de los Infiernos y de los muertos. 
Su origen es agrario, dueño de la tierra en sus profundidades y sus riquezas.
Símbolo: Cuerno de la abundancia. Carácter Ctónico. Como tal, unido a Démeter y esposo de su hija Perséfone. 
  • HERA. Esposa de Zeus. Protectora del matrimonio y de la mujer.
Diosa de la fertiliad. Protectora de los partos.
Símbolo: el pavo real, la luna, la ternera, la flor.
Divinidad poliada de Argos y Samos.  
  • DEMÉTER-CERES. Gran madre de los dioses.
Carácter Ctónico: divinidad de la tierra cultivada.
Tesmófora: engendra la vida, la renueva.
Mistérica: Iniciada en los ritos de salvación y ultratumba.
Unida a su hija Perséfone, esposa de Plutón, con los que se asocia en los ritos y fiestas de los ciclos de la vida.
Símbolos: espiga, adormidera, cerdo, objetos sexuales.   
  • HESTIA-VESTA. Considerada la mayor de las hijas de Cronos.
Diosa del Hogar y de la Virginidad.
Permanece inmóvil en el Olimpo.
Protectora de las casas, de lugares públicos y templos, donde se le adora.
Principio abstracto de la Idea de Hogar.
Símbolos: hogar, fuego sagrado.     

De estos grandes dioses surge una segunda generación divina que completa el panteón olímpico griego. 

Entre las 15 principales divinidades se reparten todas las fuerzas de la naturaleza, los atributos y cualidades divinas y humanas, así como sus protección en los distintos aspectos de la vida. Eran los dioses más honrados en el ámbito religioso griego. 



EN ESTE ENLACE PUEDES ENCONTRAR UN TEXTO CON LINDÍSIMOS MITOS GRIEGOS Y CUENTOS DE DIOSES GRIEGOS QUE ADEMÁS DE ENTRETENERTE PODRÁN AYUDARTE A COMPRENDER MÁS LOS TEMAS DE CLASE. ANÍMATE A LEERLOS Y COMENTARLO EN CLASE DE HISTORIA!!!!!!