martes, 1 de abril de 2014

Primer año.

Qué es la Historia?

La historia estudia la historia
La ciencia que estudia la historia también se llama Historia. Parece un trabalenguas pero no lo es. Es que la palabra historia designa dos temas. Por una parte, es la propia vida de las sociedad humanas a través del tiempo, por otra, se refiere a la ciencia que estudia esa realidad. la historia es una ciencia social, por que le interesa la vida de los individuos organizados en grupos. aun sí se ocupa de una sola persona lo hace cuando ésta tiene importancia para la sociedad. lo que diferencia a la historia de otras ciencias sociales, como la sociología, por ejemplo es que en ella lo fundamental es el tiempo a la historia le interesa el momento y las circunstancias en que las cosas ocurren; lo que cambia y lo que permanece, y las razones de esos cambios y permanencias. 
La Historia es la ciencia social que estudia en forma metódica y sistemática el pasado del hombre. Por medio del estudio del pasado, la historia ayuda al hombre a comprender el presente, por lo tanto el estudio de la historia es una necesidad de la sociedades humanas. La Historia Universal tiene como objetivo el estudiar el pasado de la humanidad como una totalidad. Con su estudio se logra comprender el pasado de los diferentes pueblos, la relación que hay entre esos pueblos y la influencia que ejercen unos sobre otros.  

 La Historia es una ciencia que estudia a los hombres en el tiempo pasado. Cuando estudiamos Historia debemos tener presente tres elementos:
  1. El tiempo: la Historia se refiere al pasado, más o menos remoto. Si hablamos de tu pasado, son 12 o 13 años; si nos referimos al pasado del Uruguay, nos remontaremos a casi 200 años.
  2. El espacio: tampoco es el mismo. La ciudad es diferente: las calles, las plazas, las casas... También hay diferencias entre el espacio en el que vivimos nosotros y la vida de otra persona, por ejemplo en el campo, o en una ciudad más grande, incluso en el desierto.
  3. Hechos y situaciones: cuando reconstruimos la Historia nos detenemos en el recuerdo de algunos acontecimientos que consideramos importantes, por ejemplo, la fundación de Montevideo. Pero la Historia nos cuenta también cómo se vivía en esa época, qué se comía, a qué se jugaba...
  4. Las personas: si hablamos de tu historia, vemos que todo gira en torno a tu persona: el día en que naciste, cuándo aprendiste a caminar, las peleas con tus hermanos. Si hablamos de la revolución artiguista, inmediatamente pensamos en Artigas. Pero, ¿la Historia está hecha sólo por personas importantes? ¿Y todos aquellos cuyos nombres no conocemos? ¿Quiénes acompañaron a Artigas?





    ¿Cómo se estudia y reconstruye el pasado histórico?

         Para poder reconstruir el pasado necesitamos pruebas o huellas de ese tiempo que nos permitan conocer cómo se vivía en él. Esas pruebas, que se llaman FUENTES HISTÓRICAS, son las que el pasado ha dejado entre nosotros y nos permiten conocerlo pueden ser de varios tipos:

  • Documentos escritos
  • Audiovisuales
  • Restos materiales
  • Restos fósiles
  • Fuentes iconográficas
     Los historiadores cuentan con gran cantidad de documentos escritos en épocas pasadas. Se conservan, por ejemplo, cartas escritas por Artigas, Napoleón o papiros egipcios. Los documentos que fueron escritos en la misma época en que se produjeron los acontecimientos que se relatan son documentos históricos. Uno de los problemas que debemos afrontar en Historia es que no tenemos documentos escritos sobre todos los hechos que vamos a estudiar. Si pensamos en la historia de la humanidad, hace solo 6.000 años que se inventó la escritura. Muchos pueblos anteriores a ese hecho no la conocieron. Pero no por ello podemos perder su Historia. Por suerte tenemos otras pruebas que han dejado para nosotros.
     Los audiovisuales pueden ser videos, grabaciones de voz, relatos transmitidos de padres a hijos, de generación en generación. Suelen ser tradiciones, explicaciones del mundo, cuentos y poesías. ¿De qué nos sirven? Piensa en los relatos de tus abuelos sobre tu infancia. No están en ningún libro, pero ¡qué interesantes resultan! También podemos estudiar el pasado a través de obras de cine, música y otros.
     Los restos materiales también nos ayudan a reconstruir el pasado histórico. Para reconstruir nuestra infancia, puede ser un juguete; la juventud de nuestros abuelos, un vestido de novia; la época de Artigas, una lanza… Los restos materiales son muy valiosos cuando se trata de estudiar pueblos que no conocieron la escritura y de los que tampoco conservamos relatos orales.
     Las fuentes iconográficas son las pinturas, los dibujos, las fotografías, de las cuales podemos extraer mucha información. Sólo debemos saber qué buscar en cada caso.
     Los restos fósiles son todos los restos de animales, humanos y vegetales que se han fosilizado por el paso del tiempo. Ayudan a reconstruir tanto el aspecto como la forma de vida que pudieron tener.



EL TRABAJO DEL HISTORIADOR.

La primera tarea del historiador es buscar todo lo que se ha escrito sobre el tema. tal vez no descubras un documento específico, pero en algunos referido a otros asuntos puede encontrar una pista. 
Cuando el investigador ha reunido elementos suficientes formula una hipótesis que es un intento de responder a la pregunta inicial. Como en historia no se puede experimentar, debe presentar pruebas que confirmen sus dichos. Las pruebas pueden ser documentos, testimonios orales.
 Una vez que ha culminado esta etapa, el historiador debe expresar por escrito las conclusiones a las que ha llegado. para ello redacta un texto en el que expone su visión de lo que ocurrió donde describe y explica por que pasaron las cosas. Muchas veces cuenta los pasos que ha seguido en su investigación. La producción escrita de los historiadores se llama historiografía. queda la ultima parte del trabajo: defender su visión frente a los otros colegas.    

El tiempo histórico


Cuando hablamos del transcurso del tiempo, podemos imaginarnos diferentes situaciones, porque, lo que ocurre, es que existen apreciaciones del devenir temporal. Por ejemplo:
  1. El tiempo personal: es el de cada uno, cómo vive el tiempo cada persona, la sensación temporal propia. Imagínate la clase; dura 45 minutos, pero a veces, a ti te parece que dura más. La apreciación del tiempo depende de tu vivencia personal.
  2. El tiempo social: es el que está regulado por las diferentes actividades que realizamos en conjunto con los demás. Para eso, nos ponemos de acuerdo y usamos el almanaque, el reloj. Cuando vas a clase a determinada hora y determinado día, estás haciendo uso de este tiempo.
  3. El tiempo natural: es el que está determinado por los astros; es el tiempo que marca el paso de los días, las estaciones, etc.
  4. El tiempo histórico: es el tiempo en el que transcurre la vida de las sociedades, desde la aparición de los primeros hombres hasta hoy.
Medir el tiempo
De la misma manera que ordenamos el tiempo en horas, días, años, el tiempo histórico tiene también una forma de ordenamiento. La cronología nos permite ubicar, fechar y ordenar los hechos históricos en el tiempo. Al tratarse de un tiempo muy vasto, tiene unidades de medida diferentes de las que tú usas diariamente; por ejemplo, maneja siglos (100 años) o milenios (1.000 años).
Una de las formas de representar el tiempo histórico es mediante una línea de tiempo.
La historia de la humanidad se divide en dos grandes períodos: PREHISTORIA e HISTORIA. La Prehistoria, es el período más largo que empieza con la aparición de los primeros humanos en la tierra (hace unos 4 millones de años) hasta la invención de la escritura (3.500 antes de Cristo). Aquí comienza la Historia escrita que llega hasta hoy. A su vez, ambos períodos se dividen en distintas etapas.




UNA LÍNEA DE TIEMPO SIMILAR A LA REALIZADA EN CLASE